WordPress es la herramienta más usada del mundo para crear páginas web. Flexible, versátil y con miles de opciones. Pero precisamente esa libertad hace que muchos proyectos terminen siendo un dolor de cabeza: webs lentas, mal organizadas y difíciles de mantener.
Llevo años creando webs en WordPress (y concretamente con Bricks Builder desde que salió en 2023, un constructor más avanzado y escalable que la mayoría). Hoy quiero compartir contigo los errores más comunes que veo en proyectos nuevos… y cómo evitarlos para que tu web sea realmente una inversión y no un problema.
1. Instalar demasiados plugins
El clásico. WordPress tiene miles de plugins, pero más no significa mejor.
He visto webs con 40 plugins para funciones que podrían resolverse con 3 o 4 plugins bien elegidos.
Problema:
- La web se vuelve lenta.
- Riesgo de incompatibilidades y errores.
- Más actualizaciones = más mantenimiento.
- Más probabilidad de sufrir un hackeo, no queremos malware.
Solución:
- Usa solo los imprescindibles.
- Evita plugins “todoterreno” que hacen de todo pero mal.
- Si trabajas con Bricks Builder, muchas funciones ya vienen optimizadas de serie, sin necesidad de instalar extras.
2. Diseños que no piensan en el usuario
Otro error habitual: hacer la web pensando solo en lo bonita que queda y no en lo fácil que es usarla.
Problema:
- Botones escondidos.
- Textos muy largos sin estructura.
- Formularios que nadie entiende.
Solución:
- Prioriza la experiencia del usuario: navegación simple, botones claros y llamadas a la acción visibles.
- Piensa siempre en móvil primero.
- Con Bricks Builder, la personalización es total: adapto cada elemento al contenido real del cliente, no a una plantilla genérica.
3. No cuidar la velocidad de carga
Hoy en día, una web lenta = clientes perdidos.
Si tarda más de 3 segundos en cargar, la mayoría de usuarios se va.
Problema:
- Imágenes pesadas.
- Plantillas recargadas.
- Plugins mal optimizados.
Solución:
- Optimiza imágenes antes de subirlas.
- Usa hosting de calidad (no el más barato).
- Diseña en un constructor ligero como Bricks (más rápido que Elementor o Divi, y preparado para crecer).
4. Falta de estrategia SEO desde el inicio
Muchas webs en WordPress se crean sin pensar en SEO, y luego toca rehacerlo todo.
Problema:
- No hay estructura de páginas clara.
- URLs desordenadas.
- Falta de títulos y descripciones optimizadas.
Solución:
- Define antes de empezar: ¿qué palabras clave quieres posicionar?
- Estructura tu web como si fuera un índice de un libro.
- Añade un plugin SEO (como Rank Math o Yoast) para facilitar la gestión.
En mi caso, con Bricks preparo cada web pensando en que el cliente pueda añadir contenido propio fácilmente y que cada post/artículo esté optimizado de cara a Google.
5. No personalizar el contenido
Muchas webs acaban pareciendo clones: mismas plantillas, mismos textos genéricos y fotos de stock que no dicen nada.
Problema:
- No transmiten personalidad ni confianza.
- Se nota que están hechas con prisa.
Solución:
- Dedica tiempo a personalizar los textos.
- Usa fotos reales siempre que puedas.
- Configura la web con bloques dinámicos (algo que Bricks permite a un nivel muy avanzado), de modo que cada cliente tenga contenido adaptado a su negocio.
6. No planificar el futuro de la web
El error más grande: pensar solo en la web de hoy y no en lo que vendrá mañana.
Problema:
- Webs que no soportan añadir nuevos productos o servicios.
- Diseños rígidos que no permiten escalar.
Solución: una web evolutiva
- Construye tu web como una base sólida que pueda crecer contigo.
- Si usas Bricks, la ventaja es que no quedas atado a limitaciones de plantillas: puedes añadir nuevas secciones, integraciones o automatizaciones a medida.
WordPress es una herramienta increíble, pero si caes en estos errores, tu web se convierte en un freno en lugar de un motor.
La diferencia entre una web “más” y una web estratégica está en cómo se construye: yo uso Bricks Builder porque me permite ir un paso más allá, creando webs rápidas, personalizadas y listas para evolucionar con cada cliente.
Al final, una web es como una buena receta: los ingredientes son importantes, pero lo que marca la diferencia es cómo los combinas.
¿Quieres que te ayude a evitar estos errores y a construir una web que realmente funcione? Escríbeme y lo vemos juntos.